SENTIDOS

Bésame hasta que me duelan
las ganas de besarte,
hasta que en los labios
sienta el pulso del deseo
perdiendo su voluntad
en la simetría de tu boca
en mi boca... perfecta...
Reviéntame las palabras
con el trazo furtivo
con el que perfila
humedades tu lengua...
Hipnotízame la piel,
que me abarque tu tacto
hasta que la esencia de mi carne
sea la línea aleatoria
que se confunda con tus huellas.
Tiémblame, amor,
enredándote apasionado
al reflejo de mis cosquillas,
descalzando el pellizco
que pasea por mi espalda,
mi pecho, mi vientre,
ese escalofrío en mis caderas...
Enciéndeme en ti,
hasta ser ambos
la idéntica química de un mismo latido,
jugando con ciertos sentidos
que extravían la razón
mojando la locura satisfecha
de los versos mudos
que ahogamos entre las piernas...