Acaricia mi labio
que palpita goloso
en la demanda del beso.
Habla con mi piel
el lenguaje del símbolo
que perdura en los tiempos.
Unge mi deseo
con el deseo de tu caricia
involucrada
en el horizonte
del placer que nos anega.
Siémbrame de mar,
de olas de palabras
que sacudan los sentidos,
siémbrame de espumas,
de dedos de ternura
que abracen por completo
la carne de mi soledad.
Déjame cosechar
entre los surcos de mi cuerpo
tus embates de agua y sal,
cobijarme en tu suspiro,
sentir tu haz de luz
en la penumbra
que palpita donde la Vida
se expone a comenzar.
Hoy quiero que me poseas
hasta mezclarte
con mi sangre,
que copulen los corazones
y se consuma el amor
hasta ser ambos un aliento,
un latido, un temblor,
un néctar de vida y semilla,
la misma gota del mismo sudor,
un sólo instinto
con hambre de hambre,
mano y acorde en la misma canción.
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Celsa Barja © 2010
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2 comentarios:
No me canso de leerte Celsa,
lee el ojo
goloso de verso
voraz retina
de texto converso
fiel al antojo
de su Menina.
Me encanta el primer trozo:
Acaricia mi labio
que palpita goloso
en la demanda del beso.
Un beso
No te canses!! Gracias Josep, estoy dando caña porque tengo un proyecto en mente... Me alegro que te haya gustado.
Un beso!
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