Escribo
para no callar,
para que la grafía
sea viento barriendo
mi conciencia.
Escribo
para abrazarme,
asomo de caricia
ahorcando el ansia
de esperar
la que no llega.
Escribo
destilando silencio,
para beberlo
en un sorbo
y emborrachar
este hastío
hasta que no duela.
Escribo
como prebenda,
para que mi alma
se regocije
como estúpida ingenua
en sus propias
miserias.
Escribo
como exorcismo,
para sacar
de mis versos
las espinas infectas
de mil anatemas.
Escribo
para ser sahumerio,
para perfumar
esta atroz
bacanal
de piel vacía
de caricias,
saturada
de esquivos deseos.
Escribo
en eterno suicidio,
harakiri honroso
de la palabra,
me desentraño
en cada verso
y muero con él
como fiel oibara.
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Celsa Barja © 2010
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4 comentarios:
Bárbaro Celsa, bárbaro...
Me enantan tus versos atormentados, espero que no sean un reflejo de tu alma.
También me gusta cuando escribes desde la sonrisa.
Un beso, dos besos, tres besos.
Gracias, Josep... mi alma con un poco de pranayama ya está como nueva. Estos son para uno de los proyectos en los que trabajo. Celebro que te guste mi "lado oscuro" (sonrío)...
Mil besos!
Celsa un abrazo por estar y comentar!
y siempre llueven tus palabras,en un tono menor,precioso!!!!!!!!!!!!
lidia-la escriba
Gracias a ti Lidia, en nada te haré una visita (estoy trabajando)...
Besos mil!!!
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