Soy soledad,
impaciencia abierta,
una especie de atlas
con coordenadas
equivocadas,
secreta inquietud
de silencio sin fisuras,
con una memoria
a la que duelen
las voces que nunca
he podido escuchar,
los besos desenredados
en los que nunca
me he roto,
o esas caricias
vueltas sílabas
de ciertos contornos.
Soy soledad,
esquivando torpemente
naufragios
en mi pecho,
un correr sin aliento
hasta llegar al final,
donde se quiebra
el terreno de pronto...
Miro... no hay nada,
no hay puentes,
y me exilio hacia mí
para habitarme
sola de nuevo...
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Celsa Barja © 2010
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2 comentarios:
No es que estes sola, lo que pasa es que tu alma es tan grande que no tiene gemela, y muchas como la mía,sensibles a la poesía, te miramos como luceros distantes, no queriendo inquietarte.
GRACIAS.
Oh, Francisco, qué bonito!!! Gracias por visitarme y dejar aquí tu mimo. me has hecho sonreír.
Un abrazo!
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